Una fuerza que aprieta y que suelta.
Un sentimiento de luz, de Epifanía, de eureka.
La respuesta se presenta y permanece. El camino está dado, pero no hay un final. Cada momento es la respuesta.
Ese instante.
El frenesí mira con envidia y celo.
No hay nada que temer, pues el día está hecho, el sol salió, el viento sopla, ¿qué podría pasar mal?
El pensamiento es un bosque. Lleno de arboles y vida. ¿Qué podría pasar mal?
Contemplar es la respuesta.
El circulo se completa; está lleno. Hay movimiento. Lo importante es seguir. Caminar.
La respuesta está ahí. Enfrente de ti.
En la textura, en el sabor, en el olor fresco de las flores. En los pequeños insectos que viven el tiempo relativo. En el cielo que refleja la luz y hospeda a las nubes.
La musica es un circulo. Todo es un circulo. ¿Acaso Dios es un circulo?
Lo infinito de lo infinito.
Eso sí es Grande. Imagínate, cómo debe ser lo infinito de lo infinito de lo infinito. El comienzo y el fin no existen.
Lo que somos ahora, ya lo fuimos y lo seguiremos siendo siempre.
Que dicha es ver lo pequeño, por que de eso están hechas las cosas grandes.